Cuando Estados Unidos compartió información clave sobre algunos de los más mortíferos carteles de la droga en México con su vecino del sur, esa información altamente sensible fluiría a menudo a través de Ivan Reyes Arzate.
Reyes, de 45 años, de la Ciudad de México, se desempeñó en noviembre como el más alto funcionario de la delicada unidad investigadora de la Policía Federal Mexicana.
O, como se le dijo al líder de un cartel de la droga, él era "el jefe".
Pero años antes, los federales dicen que Reyes se encontró entre otros policías corruptos en una reunión de 2009 convocada por el jefe de drogas Arturo Beltrán Leyva en Cuernavaca, México. Antes de que esa reunión terminara, Reyes compartiría una recompensa de $ 3 millones por haber desenmascarado a un informante de la DEA. Y ese informante sería más tarde secuestrado, torturado y asesinado.
Ahora, Reyes, también conocido como "La Reina", está bajo custodia federal en Chicago y acusado de conspiración para influir corruptamente e impedir un procedimiento oficial. Se le acusa de advertir a los miembros de un cártel mexicano de la droga cuando fueron blanco de una investigación de la DEA, y se le despidió cuando la DEA intervino sus teléfonos y revelo una fuente confidencial. Se espera luego que comparezca ante el tribunal el 13 de abril.
"Ellos saben que están aquí y quieren ver con quién pasan", Reyes advirtió a un ex miembro del cártel de Beltrán Leyva. No hables en absoluto.
Una denuncia penal de 43 páginas contra Reyes fue presentada en febrero y sin sellar el miércoles. Señala que Reyes, que ha asistido a seminarios de capacitación en la academia de la DEA en Quantico, Virginia, ha sido "provisto de información altamente sensible" y "supervisó las operaciones que resultaron en la detención de numerosos miembros de alto nivel y de diversos delincuentes organizados en México ", incluyendo miembros del mortífero Cartel de Sinaloa que han sido acusados en Chicago.
Beltrán Leyva fue asesinado en un enfrentamiento con las autoridades mexicanas en Cuernavaca a finales de 2009 tras ser acusado por un gran jurado aquí. El informante Reyes ayudó a desenmascarar en la reunión de 2009 "fue fundamental para asegurar la acusación de Arturo Beltrán Leyva" en Chicago, según la queja contra Reyes.
La DEA se basó en información de antiguos miembros de los cárteles Beltrán Leyva y Sinaloa para nombrar a Reyes. Las autoridades lo sospecharon por primera vez cuando la información recolectada por la escucha telefónica comenzó a coincidir con la información compartida con Reyes.
El líder de otro cartel de la droga, Ángel Domínguez Ramírez Jr., también se refirió explícitamente a "Iván" en una conversación con un asociado.
-¿Quién es Iván? -preguntó Domínguez.
"El jefe", le dijeron.
Domínguez y el asociado sin nombre entonces conspiraron para usar los lazos de Reyes con el cártel de Beltrán Leyva para mantenerlo leal.
Reyes fue confrontado por la DEA en la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México el pasado febrero, según la denuncia. Al parecer, negó haber filtrado información a los cárteles, aunque reconoció que era el único punto de contacto mexicano para la información filtrada.
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