Por robo de droga, porque “cachetearon un criminal”, porque no los apoyan y porque pueden, vendedores y trasegadores de droga del CJNG y de Sinaloa iniciaron una escalada contra las corporaciones en Baja California. Por un lado están matando a miembros de las policías y fiscalía, y por el otro, una campaña pública de desacreditación de los mandos a través de narcomantas. El General Enrique Martínez López, Comandante de la II Zona Militar, dijo esta semana que se necesita depurar las instancias de seguridad en Tijuana
Cabecillas de los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de Sinaloa, están ordenando el asesinato de policías, desde ministeriales, coordinadores, subjefes y tropa, a la vez que usan mantas con mensajes y llamadas telefónicas para amenazar a los titulares de las áreas de seguridad en Baja California.
Por 700 pesos extra, ladrones están siendo convertidos en matones y enviados por las mafias a atacar directamente a miembros de las corporaciones policíacas.
El saldo de abril en Tijuana:
* Una narcomanta contra el subprocurador de Investigaciones Especiales, José María González Martínez.
* Otra contra el titular de Seguridad Pública Estatal, Daniel de la Rosa.
* Dos narco mantas contra el jefe de Narcomenudeo, César Adame.
* Una llamada de amenaza al jefe de Homicidios Alpízar.
* El asesinato del ministerial Jesús Enrique Andrade Lugo.
* El intento de homicidio cometido contra el coordinador de Ministerios Públicos del área de Homicidios, José André Cato Pico.
* La ejecución del policía municipal Rubén Sidney Robles.
* El intento de asesinato al supervisor policiaco en la delegación Cerro Colorado, Mario Hugo Hernández Damián.
Adicionalmente, el jueves 27 de abril en Mexicali, asesinaron al ex jurídico de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Mexicali, Felipe Salazar Ruiz. En lo que va de 2017, once policías han sido baleados en el puerto.
La única respuesta de la autoridad hasta el momento, han sido las versiones de que no darán un paso atrás, y en términos de acciones, el establecimiento de un operativo especial coordinado, numeroso y permanente en La Presa, delegación que presenta la más alta incidencia en homicidios en Tijuana. Hasta ahí.
Robo de droga
Transcurría la segunda semana de abril cuando el reclamo empezó a circular entre los jefes policíacos: en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), el mensaje era simple: sus agentes debían regresar los 50 kilos de cocaína que habían robado a narcotraficantes o habría consecuencias.
Cartel de Sinaloa amenaza a Jefe de Narcomenudeo
De manera extraoficial empezaron a investigar, a preguntar, nadie admitía, pasó una semana y nadie reconoció el “baje”, tampoco regresaron la cocaína. Los jefes siguieron interrogando; es la tercera ocasión que ocurre un reclamo criminal similar en los últimos meses. A la fecha éste ha sido el más grande en términos económicos, anteriormente señalaban, el robo había sido de marihuana.
Por descarte, al interior de la PGJE determinaron que los ministeriales corruptos en esta ocasión debían pertenecer a alguno de los grupos que trabajaban en la zona Tijuana, sin embargo, entrevistados y consultados, sus jefes siguieron negándolo.
Así llegó el asesinato del agente Jesús Enrique Andrade Lugo el día 19, la tercera semana de abril. Integrantes del Grupo Coordinación consideran que el robo de droga puede ser una de las líneas del ataque, sin embargo, a la fecha el expediente de investigación no ha incluido información a este respecto.
Entre la tropa también sugirieron a los titulares de las áreas que en el tema de las drogas investiguen a los jefes del recién formado Grupo de Operaciones Especiales, los cuales se han dedicado a “pegarle a los malandros y para que se acerquen a pagar cuotas, o feriarlos cuando se los topan con droga, que revisen la forma de vida de los jefes”.
Tras la detención de dos sospechosos en flagrancia por el asesinato de Andrade -Brayan Torres y Beatriz Pérez- y algunas versiones posteriores, los primeros indicios dan cuenta que el ataque pudo venir del CJNG.
Los participantes -hasta ahora hablan de cuatro- sabían que iban a matar a un sujeto, les describieron el auto, pero no sabían que era agente ministerial. A la mujer que iba a manejar y guardar las armas le ofrecieron 100 dólares, a los matones, 700 pesos.
En este caso, las autoridades consideran posible un ataque de los mafiosos de Jalisco, primero porque son quienes reclamaban la droga, y segundo, porque al ministerial asesinado lo relacionaban como protector del Cártel de Sinaloa.
De hecho la reapertura del expediente de Andrade reveló que pese a haber sido presentado por la Policía Estatal Preventiva (PEP) como sospechoso en el secuestro de Candelario Arceaga -detenido y presentado como miembro de “Los Teos” y liberado sin cargos-, en junio de 2016, tras su declaración el ministerial manifestó que había recibido la llamada del ex ministerial Alberto Ocampo, empleado de “El Cande”, para pedirle ayuda para ir por su patrón, dado que los sujetos que lo habían privado de la libertad por una deuda, ya tenían su dinero, y les habían informado dónde recuperarlo.
Información de las áreas de inteligencia indica que Arceaga había sido privado de la libertad por operadores de Jalisco por una deuda de 400 mil dólares. Cabe agregar que la juez responsable del caso decidió que se trata de un caso de alto riesgo, por lo que ordenó que las audiencias de control de detención y vinculación a proceso fueran privadas, sin presencia de prensa. Legalmente se basó en el Artículo 64 del Código Federal de Procedimiento Penales, específicamente en la fracción I: “Puede afectar la integridad de alguna de las partes o de las personas citadas a participar”.
Atacan a instituciones
Al día siguiente del asesinato de Andrade, pasadas las diez de la noche del 20 de abril, mientras circulaba en un vehículo oficial de la PGJE por la calle Ermita y Bulevar Benítez, le dispararon al coordinador de Ministerios Públicos del área de Homicidios, José André Cato Pico.
Por su cargo no anda en la calle, tampoco es operativo que pueda ordenar liberaciones, a la fecha no se le conocen malos antecedentes, por ello su ataque extrañó a los miembros de las diferentes corporaciones consultadas. No descartan se haya metido en algo turbio, pero a la fecha, dicen no se ha sabido nada.
El día que lo balearon salió más tarde que de costumbre, usualmente se iba a las nueve de la noche, pero se quedó porque atendió una cita, una persona cuyo nombre no ha sido revelado. Otro dato extraño fue que a pesar que en teoría iba a su casa, el lugar donde lo atacaron no está en su ruta usual.
Por el ataque a Cato, quien se encuentra hospitalizado después de haber sido intervenido quirúrgicamente, la Policía Municipal detuvo a dos hombres de apellidos Carrillo y Díaz, ambos con varios antecedentes por robo de vehículo y faltas administrativas.
Los capturaron en el operativo posterior como quienes abrían baleado al ministerio público y huido en un auto sedán negro de cuatro puertas usado en el crimen. Sin embargo, no fueron procesados por este delito, por falta de elementos. No admitieron el ataque al funcionario ni declararon al respecto.
Sidney Ruben Robles de la Torre – Ejecucion de policia municipal Sidney Ruben Robles de la Torre, en la calle David Leon en la colonia Cumbres del Rubi, perteneciente a la delegacion de San Antonio de los Buenos – Arturo Pizarro Morales, Armando Quintero Bue, “El Pizarro”, presunto homicidio de agente Robles”Se presume inocente, mientras no se declare su responsabilidad por la autoridad judicial. Art.13, CNPP”
Testigos en la zona aseguraron que Cato habría sido perseguido a balazos por unos metros desde la calle Guillermo Prieto, y el abogado respondió al ataque carro a carro, sin embargo, perdió el enfrentamiento cuando los matones le dispararon mientras corrían.
“Sé que no hay mucho de que presumir, pero estamos revisando la línea de que el ataque puede venir por la investigación del homicidio del ministerial (Andrade Lugo)”, expuso el subprocurador de Investigaciones Especiales, José María González Martínez.
A la mañana siguiente se leía en dos mantas colgadas en puentes, una en el Distribuidor Morelos y otra en el peatonal del Panamericano:
“ESTO QUE LE PASO AL LIC CATO LE VA A PASAR A TODO EL GOBIERNO QUE NO ESTE Y NO QUIERA COLABORAR CONMIGO SIGUES TU ADAME EL CIELO SIGUE ESTANDO VERDE O ME APOYAN O SE MUEREN ATTE: LA RANA”, apodo con el que se identifica a René Arzate García, presunto cabecilla del cártel sinaloense en la Zona Costa del Estado, sin orden de aprehensión.
Adame es un policía de la vieja guardia, es jefe del área de Narcomenudeo y no es la primera vez que lo amenazan; en septiembre de 2016, en otra manta la acusación fue:
“Esto va para ustedes mugrosos rateros y Ministeriales, RAMÍREZ CRUZ, RAMÍREZ CASTRO, SANTOYO NUÑEZ, AYALA y otros, etc. Jefe de estos ratas es el GALVÁN todos estos de Narcomenudeo…Ustedes se robaron Una Droga Prosedente de Sinaloa en el blv 2000.
“Ibas en una Ram Blanca tu GALVAN JEFE DE TODOS TUS CÓMPLICES. Se la robaron a una camioneta Astro, mas de 200 kg de cristal, 100 de cocaína y 5 de heroina. Y dejaron a una persona tirada y esposada ahí a unos mts. de los hechos. Fuero rumbo a sus oficinas aguardar el trabajo y sacaron la mitad a su contacto de Sinaloa el que les puso el trabajo. Se repartieron y otro lo dejaron en la pick up del jefe Galvan. Si lo presentan no importa pero ustedes andan de ratas y las ratas aquí se mueren. Y mas si le roban a las personas equivocadas como en este caso sucedió. Este es el comienzo de un final ministeriales y los que anden haciendo las cosas mal.
“PD Checar las cámaras de las oficinas del lunes 17 de octubre a las 6 de la mañana en adelante
“Ahí se van enterar de todo
“Gobierno corrupto”.
La misma noche que balearon y dejaron malherido a Cato, en el puente de La Gloria en Tijuana le dejaron el siguiente mensaje al secretario de Seguridad Pública del Estado:
“DANIEL DE LA ROSA MIRA HIJO DE TU PUTA MADRE YA SABEMOS QUE LA TONTA DE PERICO QUE NOS ROBASTE LA CRUSASTE POR LOS TUNELES DE TKT. TE VA A CARGAR LA VERGA Y TE VAMOS A ENTERRAR EN ELLOS ATI Y A TU BOLA DE PERROS YA TE TENGO HUVICADOS A WELLES DE TUS PUERCOS DE TUS “PEPAS” PINCHES PERROS MUERTOS DE HAMBRE QUE NO TE ALCANZAN LOS 200 MIL DLLS QUE TE DA LA “RANA” AL MES PARA PROTEGERLOS BAJALE DE HUEVOS O HASTA TUS PERRAS TE VOY A MATAR ATTE. C.J.N.G”.
Al respecto, De la Rosa, quien no descartó la existencia de elementos corruptos que deben ser investigados y retirados del servicio, recordó que se ha detenido a criminales de todos los cárteles, lo que evidencia la ausencia de arreglos, y calificó estas acciones como “ una estrategia desesperada de guerra psicológica que traen los dos grupos delictivos, Jalisco y Sinaloa, pero en especial los de Jalisco, que utiliza esa técnica, porque ninguno se ha podido empoderar, a pesar del número de homicidios”, además, que quieren intimidar a las corporaciones para que le bajen a los decomisos y detenciones.
Buscan a “El Pizarro”
Menos de 48 horas después, a las seis de la tarde del sábado 22 de abril, al número de emergencia se reportó un hombre baleado en la calle David León de la colonia Cumbres del Rubí; al llegar las corporaciones, se completó el informe. Se trababa del policía municipal Rubén Sídney Robles y estaba muerto.
De acuerdo a la versión de un hombre que acompañaba al agente, quien estaba vestido de civil y fuera de servicio, le disparó Alejandro Sánchez Olivas alias César Iván Fernández de León, Armando Quintero o Arturo Pizarro Morales “El Pizarro”.
Primero dijo que estaban “platicando, que eran cuates -conocidos- y se ondeó”, después la versión fue que “…tuvieron un pleito al tratar de pasar los dos en carro por la calle, que es muy estrecha, y se ondeó”. Al final resultó que Pizarro sabía que Robles era policía, habló con él y decidió dispararle, aunque el testigo fue incapaz de precisar las razones.
Al interior de la corporación municipal, desde la tropa, la versión colectada fue que el agente era adicto, había operado liberando detenidos para la célula de Héctor Guajardo Hernández “El Güicho” y Juan Miguel Valle Beltrán “El Bóxer” entre 2008 y 2011. De manera más reciente -a pesar de su enfermedad terminal- hacía la misma labor para traficantes menores en la Obrera y El Rubí en Tijuana. Desde la familia los datos fue que se había separado y andaba en malas compañías.
El día que lo mataron acumulaba su tercera ausencia injustificada al trabajo como personal de seguridad adscrito al Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4).
En cuanto a “El Pizarro”, sobre quien ya pesa orden de aprehensión como sospechoso por el delito de homicidio, tiene en su haber delictivo:
Una orden de aprehensión cumplida por robo calificado en 2014; otra turnación por robo con violencia en 2013; dos fichas más por robo de vehículo en 2014; una turnación por lesiones en 2013, entre otras presentaciones a barandilla por faltas al Bando de Policía y Buen Gobierno.
Lo mandó matar “El Chaparro”
El martes 25 de abril, el supervisor policiaco en la delegación Cerro Colorado, Mario Hugo Hernández Damián, fue atacado, estaba en horario fuera de servicio en la casa familiar en Colinas de la Presa, Delegación Los Pinos, un distrito diferente al que trabaja como policía.
Hasta ahí llegaron varios hombres a vigilarlo, en un momento de la tarde salió de la casa porque iba a la tienda y fue cuando Fidencio Martin Chávez Fuentes aprovechó para acercarse con un arma en la mano, pero cuando intentó disparar el arma calibre 45, salieron dos tiros, uno rozó a la víctima. Después se le encasquilló, momento que el agente aprovechó para defenderse e intentar someterlo.
Al mismo tiempo los vecinos llamaron al número de emergencia, un vecino y un hijo de Hernández se acercaron a ayudarle.
De acuerdo a testigos, dos hombres que lo esperaban en un pick-up rojo estuvieron a punto de descender cuando vieron que llegaba una patrulla y huyeron. “Afortunadamente había una unidad en las inmediaciones y respondió de manera inmediata”, se informó.
Detenido, Chávez Fuentes dijo ser de Mexicali, gente de Sinaloa y que el objetivo del ataque era el jefe policíaco, porque había “cacheteado al hijo de ‘El Chaparro’ y por eso el padre había ordenado su muerte”; no hubo nombre ni descripción física del supuesto autor intelectual del ataque, pero lo presentaron como líder de una célula de venta de droga que trasiega mercancía entre Mexicali y Tijuana por Tecate, y entran por la Zona Este de Tijuana, donde labora el jefe policiaco.
Corrupción y depuración
En medio de estos ataques, el miércoles 26 de abril, ante representantes del Foro Cívico Tijuanense, el General Enrique Martínez López, Comandante de la II Zona Militar, habló de la necesidad de depurar las corporaciones y sacar a los malos elementos de las calles.
Recientemente la Secretaría de Seguridad Pública informó que entre diciembre de 2013 y febrero de 2017 -actual sexenio- se han depurado 67 elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Mexicali, 15 de la de Tecate; 146 agentes en Seguridad Pública Municipal de Tijuana; 10 en Rosarito; ocho en la Policía Municipal de Ensenada; 358 en la Secretaría de Seguridad Pública del Estado; además de 64 en la PGJE.
“Sin embargo, un 20 por ciento de los que no aprobaron el Examen de Control y Confianza siguen activos”.
El presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, Manuel Hernández Niebla, declaró: “He visto los números, sí se está depurando a las policías, son procesos muy lentos, no es fácil deshacerse de un mal elemento, los protegen las leyes laborales, finalmente así es y lo debemos respetar, pero no es fácil deshacerse de un elemento del que se tienen sospechas de corrupción.
“Por otro lado, entiendo que es muy difícil reclutar, y no estamos generando el suficiente número de policías que necesita la entidad. Tijuana debería tener alrededor de 4 mil, 4 mil 500 policías. Vimos la declaración de Marco Sotomayor de hace una semana y media, que decía que traía mil 500 en activo”.
ZETA pudo conocer que en este tema existe un plan piloto que pretende iniciar en Tijuana para que este proceso sea más rápido. El mecanismo les permitirá suspender a los elementos con un pago parcial del sueldo, para evitar acumular salarios caídos. De entrada están dividiendo a los policías que no han aprobado los exámenes en tres categorías e iniciarán con los más problemáticos, como los adictos y aquellos 154 policías con antecedentes por delitos cometidos en Estados Unidos, y expedientes por tortura, liberación de criminales, mover cadáveres y proporcionar información a narcotraficantes, todos identificados desde 2014, cuando el entonces secretario Alejandro Lares no los removió.
Once policías baleados en Ensenada en 2017
En lo que va del año, en las delegaciones del sur del municipio de Ensenada, once agentes municipales han sido agredidos con arma de fuego, de éstos uno perdió la vida, tres aún están en proceso de recuperación y siete fueron declarados fuera de peligro.
Sobre el estado de vulnerabilidad que enfrentan los policías en la zona rural, donde la lucha de los cárteles de droga se disputan el trasiego vía aérea y marítima, ni el Estado ni el municipio han implementado una estrategia, menos un trabajo de depuración ante la carencia de efectivos dentro de la corporación.
El recuento de agresiones se resume desde enero, cuando se registró una persecución en la colonia Leandro Valle de San Quintín, donde dos elementos fueron agredidos a balazos por sujetos a bordo de una camioneta tipo Durango.
En marzo, cuando tres oficiales salían del turno en la delegación de Cataviña, sobre la Carretera Transpeninsular hacia El Rosario, un vehículo se emparejó, al tiempo que uno de los ocupantes detonó el arma en varias ocasiones; dos resultaron heridos mientras que el comandante policiaco de El Mármol perdió la vida en el lugar.
El 18 de abril, en la colonia Lázaro Cárdenas, un conductor de una camioneta que fue intervenido por agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) que se encontraba en un operativo, disparó en varias ocasiones en contra de los oficiales. No hubo heridos y dos personas fueron detenidas con un arma calibre 45, de uso exclusivo del Ejército.
Un día después, en el Ejido Díaz Ordaz, desde un vehículo tipo Cherokee con placas nacionales, en el que iban a bordo dos personas, dispararon en contra de dos policías que los intervinieron, al tiempo que se dieron a la fuga. No hubo lesionados.
Otros dos oficiales fueron atacados cuando interceptaron a cuatro hombres con actitud sospechosa que, al notar la presencia de la policía, iniciaron una persecución que terminó en el Hotel Baja de la misma delegación, hubo disparos y uno de los agentes fue lesionado con esquirlas en la cabeza. Hubo dos detenidos.
Para el 20 abril se reportó un ataque a balazos en la delegación de San Antonio de las Minas en el Valle de Guadalupe, un hombre murió, otro presentó una lesión en el brazo, mientras que una mujer de 19 años de edad con siete meses de gestación recibió un disparo en la espalda que le perforó el vientre, por lo cual el bebé murió minutos después del ataque en el Hospital General. La PEP relaciona a la lesionada con el reciente crimen de un policía en Tijuana.
La reunión más reciente del Grupo Coordinación se realizó el viernes 21 de abril en las instalaciones Secretaría de Marina en Ensenada, ahí el gobernador Francisco Vega de Lamadrid finalmente habló de la presencia de los cárteles Arellano Félix, de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación.
Refirió que el fuerte trasiego de droga en Baja California es un problema nacional e internacional y, reiteró, se trata de una guerra entre bandas delictivas que se disputan la playa por la cercanía de la entidad con uno de los países que más consumen la droga.
Y concluyó: “El que se haya incautado esta cantidad de droga -174 toneladas- tiene sus consecuencias”.
Dejaba a su hija en el kínder cuando lo ejecutaron
Felipe Salazar Ruiz, de aproximadamente 40 años de edad, fue ejecutado luego de dejar a su hija en un kínder localizado frente a Rectoría de la Universidad Autónoma de Baja California.
Los hechos ocurrieron alrededor de las nueve de la mañana, a la entrada de los menores al preescolar, cuando el ex jurídico de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Mexicali fue atacado por dos personas que viajaban en un Ford Fusion color dorado.
Según testigos, solo uno de los ocupantes del vehículo se bajó, un joven de tez blanca, con camisa a cuadros y una gorra para ocultar su rostro. Luego de realizar los disparos huyeron inmediatamente, la acción fue tan rápida que incluso los menores del preescolar se percataron del hecho hasta que llegaron elementos de la Policía Municipal y una ambulancia, la cual corroboró que la víctima había muerto instantáneamente.
El cuerpo de Salazar Ruiz quedó tendido a un costado del vehículo en que viajaba, una camioneta Ford F150 color gris doble cabina, placas de circulación UE67812, la cual quedó estacionada en doble fila.
Según datos de la PGJE, el primer dato que resalta fue que el vehículo que manejaba traía precisamente placas de Sinaloa.
El occiso trabajó para el Departamento Jurídico de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Mexicali, bajo el mando del militar José Ramírez Cardos; dejó el cargo luego de no poder acreditar los Exámenes de Control y Confianza, por lo que se le dio baja en la cooperación.
Salazar contaba con una empresa de seguridad privada que daba atención a un casino de la localidad y, como abogado, atendía casos de orden federal, lo cual sería la primera línea de investigación de su homicidio.
Entre asesinatos, narcomantas y agresiones a policías
439 personas han sido ejecutadas en lo que va de 2017 en Tijuana, 107 en abril. A esta serie de asesinatos, además de ataques entre narcomenudistas, destacan durante esta semana las agresiones a tiros a dos policías y un ministerial, así como las amenazas a mandos policiacos a través de mensajes colocados en diversos puentes de la ciudad.
La noche del jueves 20 de abril, fue violentado a tiros José Cato Pico, coordinador de Ministerios Públicos de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Recibió impactos en tórax y abdomen. Su estado de salud se reporta grave, pero estable.
Después de la agresión al empleado de la Policía Ministerial, las amenazas en narcomensajes colgados en puentes siguieron. En el Distribuidor Morelos fue dejada una manta color blanco dirigida al jefe de Grupo de Narcomenudeo de apellido Adame. Otra lona similar se amarró en un puente peatonal frente a la colonia Panamericano, ambas bajo la rúbrica de “La Rana”, apodo de René Arzate García.
Pero minutos antes de ese hecho, en el puente La Gloria, sobre la Carretera Libre Rosarito-Tijuana, se dejó un mensaje amenazante en contra del secretario de Seguridad Pública Estatal, Daniel de la Rosa Anaya. Estaba firmado por el CJNG.
La tarde del sábado 22 de abril, cuando circulaba a bordo de su camioneta particular Explorer blanca, un policía municipal identificado como Rubén Sídney Robles fue ejecutado en la colonia Cumbres del Rubí. Investigaciones refieren que la agresión se debió a un altercado entre automovilistas. La víctima estaba comisionada al C4 y tenía una enfermedad terminal.
El lunes 24, un hombre de entre 30 y 35 años de edad fue asesinado en la Zona Norte. También ese día se localizó el cuerpo calcinado de un hombre, a espaldas del lugar conocido como Mexitlán, en la Zona Centro.
El martes 25, otro policía municipal fue agredido a balazos muy cerca de su domicilio en Colinas de La Presa. Se trata de Mario Hugo Hernández Damián, subjefe de distrito, quien resultó ileso. Un presunto responsable fue detenido.
El mismo día se reportó a la central de emergencias el cuerpo sin vida de Juan Agustín Rosales Díaz, Tenía heridas punzocortantes y estrangulamiento. Los hechos ocurrieron en Pedregal de Santa Julia Y en su domicilio, en la colonia Rincón Dorado, fue asesinado a balazos Adán Valderrama, de 50 años. En la misma fecha se reportó un cuerpo encobijado y atado de pies en Avenida Las Flores esquina con Privada Orquídea, del fraccionamiento Villas del Álamo.
En entrevista con medios de comunicación, el secretario de Seguridad Pública Municipal de Tijuana, Marco Antonio Sotomayor Amezcua, señaló que en el transcurso del año suman dos agresiones contra municipales, pero advirtió, tales provocaciones y los señalamientos a mandos policíacos del Estado no generarán un cambio de estrategia operativa.
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